Por: Fabio Mena Revista Milenium
- Garantías y plazos varían según montos solicitados
- Créditos están orientados a distintos grados académico así como otros gastos
Los interesados en continuar sus estudios cuentan con distintas opciones de financiamiento, tanto en entidades bancarias como en la Comisión Nacional de Préstamos para la Educación (Conape).
Los préstamos se pueden realizar directamente en las oficinas de cada entidad o por medio electrónico, y tienen distintas coberturas que pueden ser con garantía fiduciaria o hipotecaria, dependiendo del monto solicitado.
Según informó Adrián Blanco, secretario ejecutivo de Conape, para el periodo lectivo que empezó en enero del 2017, la entidad tiene la estimación de colocar ¢31.000 millones de colones para estudiantes que requieren apoyo financiero para iniciar su estudios o para aquellos que ya están estudiando.
Como parte de los requisitos que Conape solicita, destaca la excelencia académica; menor oportunidad de desarrollo y no contar con recursos para pagar la universidad, así como presentar uno o dos fiadores como garantía, o bien una propiedad para respaldo hipotecario, dependiendo del monto del préstamo.
El estudiante interesado puede tener acceso a este servicio o solicitar más información sobre los requisitos al ingresar a la página www.conape.go.cr.
Más financiamiento para estudiantes
Como parte de las opciones de financiamiento para realizar estudios, el Banco Nacional de Costa Rica (BNCR), ofrece BN Educación, que es un préstamo convencional o con un período de gracia que permite que se pueda empezar con el pago de las cuotas al finalizar el plan de estudios, con un plazo de hasta ocho años con garantía fiduciaria y 20 años con hipoteca.
Por su parte, el Banco de Costa Rica (BCR), ofrece financiamientos para estudios con montos que van desde los $1.000 hasta $40 mil con garantía fiduciaria, y además por un monto de $150 mil por medio de hipoteca.
En el caso del Banco Popular (BP), el financiamiento alcanza un monto máximo de $25 mil, para estudiar ya sea en el sector público o privado, con opciones que incluyen o no garantía fiduciaria con plazos para pagar hasta de cinco años.
En la mayoría de los casos, las entidades financieras requieren una factura proforma del costo total de los estudios, ya sean de grado o postgrado además de proyecciones de otros gastos en que se incurriría.