Reactivan Cámara Costarricense de Pymes en Costa Rica

La Cámara Costarricense de Pymes, CCP ha renacido con una nueva junta directiva conformada por empresarios y empresarias dueños de su propio negocio, que en colectivo cumplen con paridad de género.

La Junta Directiva, consciente de los desafíos y oportunidades que enfrentan las Mipymes, está decidida a marcar un punto de inflexión en el panorama empresarial costarricense. Sus miembros son:

1.    Rafael Sáurez Barboza, presidente, Grupo KAM

2.    Francella Morera, primera vicepresidenta, Candelería D´Fran

3.    Adrián Morazán, segundo vicepresidente, Simetría Digital

4.    José Ricardo Mora Valverde, secretario, Inaltum Proyectos

5.    Alexis Arias, tesorero, Trade & Law Services

6.    Martha Arroyo, vocal 1, Quiropráctica Capri Consultorios

7.    María José Mena, vocal 2, Pollen Keepers

8.    Cibeles Andrea Ebanks, vocal 3, SP Security-Talos /Tico a lo Tico Tours

9.    Raquel Acosta, fiscal, Cuando me da la gana

“El objetivo principal de la CCP es representar y defender los intereses de las Mipymes ante autoridades gubernamentales, organizaciones y otras entidades relevantes, y con ello influir en decisiones y acciones que atañen directamente a este sector”, informa Rafael Saurez Barboza, presidente de Junta directiva.

La CCP -cuya Junta Directiva nombró a Marilyn Batista Márquez como directora ejecutiva-, se dio a la tarea de analizar los retos prioritarios que enfrenta las micro, pequeñas y medianas empresas, con el objetivo de convertirlos en sus ejes de trabajo a partir del 2024.

Se identificaron ocho temas en los que se enmarcarán sus acciones, y a la vez, definirán sus políticas y asignación de recursos, como representantes de este sector que en Costa Rica genera el 47% del empleo y representa el 35.7% del PIB. Estos son:

1. Falta de representación: la ausencia o mínima representación de este sector ante diversas instancias, como el gobierno, instituciones financieras y otros actores relevantes en el ámbito empresarial, trae como resultado, que éstas no pueden enfrentar desafíos significativos para hacerse escuchar y tener un impacto en las políticas y regulaciones que afectan su entorno empresarial.

2. Acceso limitado a financiamiento: las Mipymes, enfrentan dificultades para obtener los recursos económicos necesarios para operar, crecer y desarrollarse. Este desafío se manifiesta de diversas formas y puede ser causado por una serie de factores tanto internos como externos.

3. Burocracia y regulaciones: el entramado normativo y administrativo que deben enfrentar las Mipymes para operar en el país, con requisitos legales y regulatorios, son abrumadores, debido a la multiplicidad de trámites y la falta de claridad en los procedimientos. Esto puede dificultar la comprensión y el cumplimiento adecuado de las regulaciones, especialmente para este sector con recursos limitados de gestión.

4. Contratación y retención de recursos humanos: en el contexto costarricense, la contratación y retención de recursos humanos para este sector presenta desafíos específicos que afectan su capacidad para mantener y desarrollar su fuerza laboral de manera efectiva.

5. Escaso acceso a programas de capacitación y asesoría individualizada: se refiere a los desafíos que enfrenta este sector en cuanto a la actualización profesional, desde la perspectiva de la administración de empresas y el desarrollo de habilidades blandas con programas de formación especializada y asesoramiento personalizado que les permitan mejorar sus habilidades, conocimientos y capacidades

6. Altas cargas impositivas empresariales: las Mipymes en Costa Rica están sujetas a una variedad de impuestos, tanto directos (como el impuesto sobre la renta empresarial) como indirectos (como el impuesto de valor agregado). Estos pueden representar una carga significativa para este sector, especialmente cuando se consideran en conjunto con otros costos operativos.

7. Débil acceso a tecnologías y mercados: existe una limitada disponibilidad -lo cual incluye bajo costo- de recursos y oportunidades para que las pequeñas y medianas empresas accedan a la aplicación de la tecnología, la ratificación e innovación, que le permitan ser más competitiva y eficiente la actividad de la empresa.

8. Destacar en un mercado competitivo: el reto de destacar en un mercado competitivo implica la dificultad que enfrentan las pequeñas y medianas empresas para diferenciarse y sobresalir en un mercado saturado y dinámico.

“Es amplia nuestra agenda de trabajo y retos a enfrentar en paralelo a proporcionar a nuestros afiliados herramientas, recursos y capacitación para mejorar la competitividad y sostenibilidad, generando la capacidad de una ruta de escalabilidad” comenta Saurez Barboza.

La CCP también está comprometida en fomentar la colaboración y el intercambio de conocimientos entre las Mipymes, facilitando la creación de redes y alianzas estratégicas, para incidir en el aumento de su capacidad para generar negocios.

Contacto: Rafael Saurez Barboza, Cel. 7050-7023

Correo: rsaurez@ccpymescr.org